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Denominación de Origen Siurana
El valor de un origen reconocido y protegido
En el mundo del Aceite de Oliva Virgen Extra, el origen no es un simple dato; es una garantía de identidad, trazabilidad y excelencia. Pertenecer a una Denominación de Origen significa someter cada paso, desde el árbol hasta la botella a un marco estricto de calidad que el consumidor puede reconocer y confiar.
La D.O.P. Siurana es una de las denominaciones más antiguas y respetadas de España. Solo el 8 % del aceite de oliva virgen extra producido en el país cuenta con una Denominación de Origen; dentro de ese reducido porcentaje, una parte aún más selecta pertenece a la D.O.P. Siurana, una de las más valoradas y prestigiosas.
Pertenecer a Siurana es formar parte de la élite del AOVE:
aceites escasos, controlados y fieles a su territorio.
Su función no es solo certificar un territorio, sino proteger un estilo de cultivo, una forma de elaborar y un perfil sensorial que forma parte de la historia del Mediterráneo. Cuando un AOVE lleva su sello, está declarando que procede de un lugar concreto y que ha sido elaborado siguiendo criterios que priorizan la pureza, la autenticidad y el respeto por la tradición.
Qué garantiza una Denominación de Origen
Pertenecer a una D.O. significa ofrecer un AOVE con una identidad transparente y verificable. Este sello asegura:
- Trazabilidad absoluta: cada botella puede relacionarse directamente con la parcela donde nació el fruto.
- Control de calidad riguroso: solo los aceites con parámetros físico-químicos y sensoriales excelentes pueden ser certificados.
- Protección frente a imitaciones: garantiza que el consumidor recibe exactamente lo que promete la etiqueta.
- Preservación del patrimonio agrícola: mantiene vivas las prácticas y variedades que distinguen a un territorio.
- Seguridad para el consumidor: un estándar reconocible que asegura autenticidad y excelencia.
En un mercado saturado de aceites sin origen claro, la D.O. actúa como una brújula: dirige al consumidor hacia aceites que respetan el lugar del que proceden y el oficio con el que se elaboran.
La personalidad de la D.O.P. Siurana
La Denominación de Origen Protegida Siurana abarca un territorio singular del Camp de Tarragona y las comarcas próximas al Montsant, donde el olivar convive con un paisaje de montaña y sol mediterráneo. Esta área, marcada por suelos calcáreos, pendientes y clima de contrastes, da lugar a aceites de características únicas.
Lo que define a Siurana es:
- Un perfil sensorial delicado y armonioso, con frutados elegantes y matices vegetales finos.
- Una calidad estrictamente regulada, con acideces muy bajas y parámetros de estabilidad superiores.
- Una variedad emblemática: la arbequina, cultivada aquí durante siglos y reconocida por su suavidad y equilibrio.
- Una elaboración cuidada, que exige molturar el fruto en pocas horas para preservar toda su frescura.
Cada aceite certificado por Siurana es una expresión sincera del territorio: un equilibrio entre técnica artesanal, tradición y una naturaleza que imprime carácter sin estridencias.
Por qué un AOVE con D.O.P. Siurana es diferente
Para el consumidor, elegir un aceite con esta denominación es elegir confianza. Significa acceder a un AOVE:
auténtico y verificado, estable y equilibrado, delicado en aromas pero profundo en matices, coherente con una tradición histórica, y ligado a un paisaje que define su personalidad.
En un entorno donde la calidad real se distingue cada vez más de la apariencia, la certificación Siurana aporta algo esencial:
la certeza de un aceite que nace de un territorio concreto y de una manera concreta de entender el olivo.
Siurana en HOSTALETS 1898
Para nosotros, formar parte de la D.O.P. Siurana es asumir un compromiso con el origen y el oficio
Significa reconocer que nuestro AOVE no es solo el fruto de la arbequina, sino del lugar exacto donde crece: un paisaje protegido, un clima determinado y una tradición que ha sabido mantener la esencia con el paso del tiempo.
Es, en definitiva, afirmar que cada botella de HOSTALETS 1898 pertenece a una familia de aceites que honran la tierra, el rigor y el valor de aquello que perdura.